En un histórico acto en las escalinatas del Congreso de la Nación, Javier Milei asumió la presidencia de Argentina con un discurso enérgico y desafiante. El flamante mandatario centró su mensaje en la crítica situación económica del país, destacando la herencia de una «inflación plantada del 15,000%» dejada por el Gobierno saliente.

Milei responsabilizó de la calamitosa situación que vive Argentina a la anterior administración kirchnerista y prometió luchar «con uñas y dientes» para erradicar la hiperinflación. En un llamado a la unidad, instó a los argentinos a ponerse de pie y enfrentar juntos los grandes desafíos que se presentan.

En su primer discurso de más de 30 minutos, Milei también abordó su visión política, dejando claro que su proyecto es un «proyecto de país» y no de poder. Aseguró que no perseguirá ni saldará viejas vendetas, pero no tolerará la hipocresía, deshonestidad o ambición de poder que obstaculicen el cambio necesario.

Dirigiéndose a la clase política, sindical y empresarial, el presidente invitó a aquellos que quieran sumarse a la nueva Argentina, sin importar su pasado, siempre que compartan la visión de hacia dónde debe dirigirse el país. Advirtió a quienes busquen utilizar la violencia o extorsión, asegurando que se encontrarán con un líder de convicciones inamovibles.

Milei enfatizó que no claudicará ni retrocederá, comprometiéndose a avanzar con los cambios que el país necesita, convencido de que abrazar las ideas de la libertad es la única salida del «pozo» en el que se encuentran los argentinos.

En relación a las organizaciones sociales, Milei fue tajante: «El que corta la calle no cobra». Estableció un nuevo contrato social donde el Estado vela por los derechos, pero no dirige las vidas, y donde quien transgrede la ley no recibe asistencia.

El presidente cerró su discurso con un mensaje esperanzador, comparando el desafío con la fiesta de Januca, la fiesta de la luz. Recordó la historia de los macabeos y citó la importancia de la verdad sobre la mentira, expresando su confianza en que Argentina saldrá adelante.

Javier Milei asume la presidencia con un compromiso firme de superar los desafíos económicos y políticos, prometiendo una nueva era para Argentina basada en la libertad y la verdad.