Con tan solo 16 años, Candela Francisco Guéçamburu, originaria de Pilar, se ha convertido en una figura destacada en el mundo del ajedrez. Tras su triunfo en el último Campeonato Continental Femenino en La Habana, donde obtuvo el título de WGM (Gran Maestro Femenino), ahora se prepara para enfrentar un nuevo desafío: representar a Argentina en la Copa del Mundo 2023 en Bakú, Azerbaiyán.

En el marco del Día Internacional del Ajedrez, celebrado el 20 de julio, Candela se encuentra participando en el festival de ajedrez «Ilusión Mundialista» en Tecnópolis, en lo que será su despedida previa a su partida hacia Bakú. El torneo se llevará a cabo del 29 de julio al 25 de agosto, y Candela será la jugadora más joven entre las 103 participantes, entre las cuales se incluyen destacadas figuras como sus compatriotas WIM (Maestra Internacional Femenina) María José Campos y WIM Ana Paola Borda.

En una entrevista concedida a Página 12, la joven ajedrecista expresó sus grandes expectativas para el torneo y su deseo de llegar lo más lejos posible en la competición. «Daré lo mejor de mí en cada partida y espero desplegar mi máximo potencial», comentó con entusiasmo. Consciente de que enfrentará a rivales con más experiencia y trayectoria, Candela se muestra confiada en su capacidad y agrega: «Con ayuda de Dios, nada es imposible».

A pesar de su juventud, Candela ha demostrado una preparación excepcional, en su mayoría autodidacta, aunque ha recibido algunos consejos puntuales de sus profesores. «Me estoy preparando sola, pero he solicitado a mis profesores algunos consejos, ya que cada uno tiene su estilo y estrategia. Al final, soy yo quien debe decidir qué jugar», afirmó la joven ajedrecista.

Su dedicación al ajedrez ocupa gran parte de su día, y gracias a la modalidad de estudio en línea en su colegio, Candela puede administrar su tiempo de forma eficiente y dedicar más horas a su pasión. Los esfuerzos y logros obtenidos han llevado a Candela a ser reconocida por los medios de comunicación, agradeciendo el apoyo brindado por su familia y profesores a lo largo de su carrera.

«Creo que soy única e irrepetible, tal cual como Dios me creó», respondió al ser consultada sobre qué la diferencia de otros ajedrecistas en su juego. Su meta es convertirse en Gran Maestro (GM) en la categoría absoluta, y aunque reconoce que los planes de trabajo para alcanzar este objetivo difieren de los de la Copa del Mundo, sabe que la disciplina, la perseverancia, el tiempo y el estudio serán fundamentales en ambos casos.

Con la mirada puesta en el futuro, Candela se enfoca en finalizar sus estudios antes de tomar decisiones sobre su carrera ajedrecística en Europa, donde sabe que encontrará mayores oportunidades para enfrentarse a los mejores jugadores del mundo. Además, considera que el ajedrez debería tener una presencia más destacada en las escuelas, ya que ofrece beneficios significativos en áreas como la concentración, la disciplina y la perseverancia.

Candela cuenta con el apoyo de la Federación Argentina de Ajedrez, una beca del Gobierno Nacional y el respaldo de la Municipalidad de Pilar para su preparación y viajes. Sin embargo, la joven ajedrecista reconoce que contar con un patrocinador sería de gran ayuda, dado que su carrera implica la participación en varios torneos a lo largo del año.

El ajedrez ha brindado a Candela la oportunidad de crecer, conocer distintos lugares y personas, y recibir el cariño de la gente. A cambio, ella dedica su tiempo, pasión y amor a esta disciplina que la ha llevado a alcanzar logros notables a una temprana edad.