El gobernador electo de San Luis, Claudio Poggi, anunció hoy durante una reunión de trabajo con legisladores provinciales que el déficit de la provincia en el año 2022 ascendió a más de 7 mil millones de pesos. Esta cifra fue revelada tras el análisis exhaustivo de la Cuenta de Inversión del año pasado realizado por el equipo de Cambia San Luis.

Durante el encuentro, Poggi y los legisladores examinaron detenidamente el informe preparado por el especialista y ex ministro de Hacienda, Néstor Ordoñez, quien concluyó que el Gobierno encabezado por Alberto Rodríguez Saá cerró el año pasado con un déficit considerable. Según las cifras presentadas, las cuentas provinciales se encuentran en números rojos.

En una conferencia de prensa posterior a la reunión, el gobernador electo ofreció más detalles y advirtió que, a pesar de que el Gobierno muestra un superávit en su cuenta de inversión, la realidad es que existe un déficit. Poggi explicó técnicamente la preocupante situación de la provincia: «Muestran como un recurso, como un ingreso tributario, como un ingreso que tuvo el Estado, a la venta de los bonos; que es un activo, no es un ingreso. Esos bonos ya no existen más. Entonces con eso maquillan el déficit y lo transforman en superávit».

El gobernador electo detalló que, según el informe, en lugar de tener un superávit de 4.000 millones de pesos, como se indica en la cuenta de inversión, en realidad se registra un déficit de 7.000 millones de pesos debido a que se incluyó la venta de títulos por un valor de 11.000 millones de pesos como recursos, pero estos ya no existen.

Poggi expresó su preocupación por la situación financiera de la provincia y reflexionó sobre el estado de las cuentas cuando dejó el gobierno en 2015: «Dejamos una provincia con pleno empleo, sin inseguridad, en paz social, con un cuarto de la pobreza que hoy tiene. En ocho años, se cuadruplicó la pobreza. El 62% de los niños viven en hogares con necesidades básicas insatisfechas. Es desgarrador el dato, pero es la realidad. Tenemos la peor seguridad, las escuelas hechas bolsa y déficit fiscal, eso es lo que vamos a recibir».

El gobernador electo destacó además que el modelo fiscal que solía tener San Luis está destruido y señaló que solo el 12% del presupuesto actual se destina a obras públicas. Además, aclaró que de ese porcentaje, el 5% es financiado directamente por el Gobierno nacional, lo que significa que la provincia solo utiliza el 7% de sus propios recursos para las obras de infraestructura.

La situación financiera de San Luis se presenta como uno de los desafíos más apremiantes que enfrentará Claudio Poggi al asumir el cargo el próximo 10 de diciembre.