La victima de la inseguridad fue un repartidor que vive en la zona céntrica de la ciudad y a quien la mañana del sábado, delincuentes aprovecharon que no se encontraba nadie en la vivienda y se llevaron documentación de motos, tarjetas de débito, dinero, un celular Samsung S10, una mochila, llaves, zapatillas de la marca Nike Vapormax de color negro y gris, una computadora y cascos LS2 y Hawk.
Cuando el propietario regresó y se encontró con el panorama, acudió a la Comisaría n.° 1, de la cual lo separa una cuadra. Pero fue aún más el malestar debido a que espero horas y nunca lo atendieron. El damnificado cuestionó la crisis de inseguridad que vive en San Luis, y que se da no sólo cuando las casas están solas, sino también en la calle.
“Pienso andar con una picana por cuestiones de seguridad, pero seguro me identifican y despliegan un mega operativo para una persona que se quiere cuidar de que no le roben y agarran de testigo a un delincuente. Vivimos en el mundo del revés”, aseveró.